top of page

Limites... y miedos (a perder)

  • Foto del escritor: Junio Gulinelli
    Junio Gulinelli
  • 30 oct 2024
  • 3 Min. de lectura

Actualizado: 25 sept

Que se hable de un proceso individual, de pareja, familiar, de amistad o de crianza, siempre es un tema recurrente que, o si o si, al final va a aparecer. Saber poner los limites a los demás, al igual que recibirlos, a menudo nos cuesta un montón.



ree


Cuando nos tocan núcleos internos mas frágiles, todos vacilamos en poner las barreras. Es un tema siempre a revisar y, creo, que nos acompaña para toda la vida. En un grupo de padres que se preparan al nacimiento de sus criaturas, el otro día hablábamos del miedo, al momento del nacimiento, de no saber poner limites a la familia para proteger y cuidar las necesidades de la mama y la criatura recién nacida. En estos grupos siempre sale esta inquietud. Miedo a que no entiendan..., a que se enfaden, a crear conflictos. El miedo, mas profundo y nuclear, creo yo, a perder el otro. Es un miedo bastante común que se puede despertar a la hora de sentir que tengo que poner un limite. Y de hecho, cada vez que pongo un limite, estoy rompiendo algo, pierdo o renuncio a algo, y puede que me sienta mas solo.


Un padre compartió que al nacer su primera hija en pleno covid, y sabiendo que su familia no se aguantaría para ir a ver la bebe, decidió con su pareja no avisar a nadie del nacimiento hasta unos días después, cuando ya se sentían mas seguros. Esto creo que es poner un limite con arte. Podría decir "que fuerte!" “egoístas”, “bruscos” “insensibles”, etc... pero al final los que hicieron esta mama y este papa fue protegerse, aunque esto implicar romper o perder algo.


De esto creo que se trata, los limites no son para que los otros los entiendan, sino para que los respeten. Si hay espacio para que los entiendan, estupendo, pero no es esta la prioridad. Y si esta se convierte en la prioridad, que al final termina bloqueandome justo cuando necesito reaccionar, es que estoy en mi película, alimentando mis propias neurosis, mis proprios miedos, y no me estoy protegiendo de lo que esta sucediendo. El tema de los limites me parece que tiene muchas facetas, muchas capas, es estructural y relacional, social y cultural, y esta me parece la capa mas básica. Un punto de partida: cuidarse.


Los limites no son para que los otros los entiendan, sino para que los respeten. El resto es mi película. Y esta película es justamente lo que, si la observo como testigo externo, me va a dar poco a poco, muy poco a poco, y con mucha paciencia, la información de como lo hago yo para que no se respecten mis limites (o para que yo no respecte los de los demás).


Puede que al final de este largo proceso, si es que hay un final, aparezcan algunos porqués. Las famosas causas nucleares: traumas, historias pasadas, heridas, introyectos. Pero yo creo que estas causas no son "respuestas", no es que me permitan cambiar si las entiendo, sino aparecen simplemente como resultado del proceso, como consciencia o darme cuenta. Esto sucede si hago lo de mirarme. Son porqués sin punto de interrogación. Y cuando esto sucede es que algún cambio ya se ha producido. Y en este caso ya me puedo ver poniendo limites de forma mas segura, clara, contundente y eficaz. Es un proceso.

 
 
 

1 comentario


euridiceallojoana
30 oct 2024

Complicado tema a abordar, sobretodo porque si me parece q es cultural y no solo cuesta que lo sigan sino también ponerlos.

Me gusta

© 2020 Creado por Junio Gulinelli

bottom of page